¿Sabes qué son?
Un esguince, tal como lo explica el Instituto Nacional de Artritis y Enfermedades Musculoesqueléticas y de la Piel, NIH, es una lesión del ligamento, es decir, del tejido que conecta dos o más huesos en una articulación, por lo que ese fuerte dolor que sientes se da cuando uno o más ligamentos se estiran. Esto ocurre con mayor frecuencia en el tobillo y en la muñeca, generalmente por caídas. Mientras que, un desgarro es una lesión de un músculo o de un tendón por una torcedura o tirón. Pueden ser causados por una lesión reciente, levantar objetos pesados de forma incorrecta o sobrecargar los músculos.
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¡Conoce los síntomas!
Si sientes dolor, presentas hinchazón o moretones y tienes dificultad para mover esa parte de tu cuerpo entonces se trata de un esguince, que se suelen dar por caídas y golpes que desplazan tu articulación de su posición normal. Por otro lado, si tienes espasmos musculares, calambres, hinchazón y dificultad en los movimientos, estamos hablando de un desgarro. Es común que ocurran en la espalda y los músculos detrás del muslo.
¿Cómo se tratan?
El tratamiento, generalmente, es el mismo:
¡Tú puedes ayudar a prevenirlos!
¡Porque todos podemos sufrir un esguince o desgarro, aprende a diferenciarlos!