El autismo: qué es, cómo se manifiesta y algunos consejos

Última actualización: 31/03/2023

Tiempo de lectura: 2 minutos

Si conoces a alguien que tenga dificultades para interactuar o comunicarse, puede deberse al Trastorno del Espectro Autista (TEA), una afección que se relaciona con el desarrollo cerebral y afecta la forma como alguien percibe y socializa con las demás personas.  

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¿Qué es el autismo? 

El autismo es una afección que se relaciona con el desarrollo cerebral y afecta la forma como alguien percibe y socializa con su entorno y personas. Normalmente estas personas se diferencian por tener dificultades para interactuar o comunicarse con los demás. 

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), 1 de cada 160 niños en el mundo sufren de Trastornos en el Espectro Autista (TEA), en donde suele presentarse en la infancia y persistir hasta la adolescencia o edad adulta.    

El TEA abarca múltiples síntomas y varía en su gravedad, en donde suele comprender patrones conductuales repetitivos y limitados. Por lo anterior, en este grupo podemos incluir afecciones como el autismo, el síndrome de Asperger y el trastorno desintegrativo infantil, entre otros.  

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¿Cómo se manifiesta el autismo?  

El autismo se manifiesta en una persona así: 

  • No mira, ni señala objetos cuando alguien más se los muestra.   
  • Tiene dificultad para relacionarse y no muestra interés hacia los demás, por lo que no parece ser consciente cuando alguien le está hablando.   
  • Evita el contacto visual y prefiere aislarse, así mismo, le cuesta entender los sentimientos de otras personas.    
  • No le gusta el contacto físico como abrazos y repite palabras constantemente.
  • Le cuesta habituarse a nuevos cambios en su rutina y repite las mismas acciones.
  • Presenta pocas reacciones ante cambios en el ambiente como sonidos, olores o aspecto de las cosas.    

En algunos casos las personas con TEA pueden vivir con normalidad, hay otros con sintomatología grave que requieren apoyo y atención toda la vida. Por eso, la importancia de un diagnóstico oportuno para lograr intervenciones psicosociales que permitan elevar la calidad de vida de quienes lo padecen.  A pesar de que no existe una cura definitiva, sí existen tratamientos que pueden marcar la diferencia. 

El autismo y sus factores de riesgo 

Los factores de riesgo del autismo son: 

  • Sexo: es cuatro veces más frecuente en los niños que en las niñas.   
  • Antecedentes familiares de la enfermedad.   
  • Otros trastornos como esclerosis tuberosa y síndrome de Rett.    
  • Bebés prematuros que nacen antes de las 26 semanas de gestación.   

10 consejos para ayudar a una persona con autismo: 

  1. Aprende a ver el autismo como una habilidad diferente en vez de percibirlo como una discapacidad.
  2. Apóyalo en la interacción social, tienen dificultades para entablar una conversación o unirse por propia cuenta a una actividad o juego, no obstante, es algo que desean.
  3. Comunícate de una manera clara y precisa, las personas con autismo interpretan literalmente el lenguaje. Evita el sarcasmo, palabras con doble sentido o las metáforas.
  4. Contribuye en su aprendizaje, no se trata únicamente de decir cómo se hace determinada actividad sino de mostrarle el proceso para que así pueda repetirla y tomarla.
  5. Ten paciencia, en caso de dar instrucciones o explicar algo, debes tener en cuenta que presentan dificultad para comprender debido al alto nivel de estímulos a los que están expuestos.
  6. Reconoce sus señales y vocabulario, debido a una dificultad llamada ecolalia, tienden a repetir palabras y frases que escuchan durante una conversación. Mantente atento a su lenguaje corporal.
  7. Evita las críticas, incluso las constructivas, las personas con autismo retrasan su aprendizaje en entornos despectivos.  Enfócate en lo que puede hacer en vez de mirar lo negativo.
  8. Identifica oportunamente aquellos factores que impactan en sus cambios de ánimo que pueden perjudicar su estabilidad emocional e incluso física ¡Sé un observador!
  9. Regala sonrisas y ámalo incondicionalmente, si es parte de tu familia, un amigo o un conocido, hazlo sentir importante, recuérdale cada día el valor que tiene en tu vida.
  10. Verifica que su estado de salud esté al día, mantén su esquema de vacunación completo y llévalo frecuentemente a donde un profesional de la salud para realizar un diagnóstico médico y así iniciar terapias en caso de ser requeridas. 

 

 

 

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