Así como te acompañamos durante todo tu embarazo, queremos seguir a tu lado en este momento de postparto para que, te cuides al máximo y estés libre de cualquier riesgo. 

Como lo define Mayo Clinic, el postparto es conocido también como puerperio o dieta, durante las seis semanas siguientes del nacimiento de tu bebé y salida de la placenta, en donde tu cuerpo empieza a recuperarse y tu útero regresa al tamaño de una pera pequeña, si hay herida cicatrizará y los músculos y el tejido estirado volverán a su forma normal. 

Además, ten en cuenta que presentarás loquios. Una secreción líquida que expulsas por la vagina y contiene sangre y células del interior de la matriz, vigílalos de la siguiente manera: 

• Rojos: Durante los 3 primeros días postparto 
• Rosados: Duran de 3 a 7 días postparto 
• Blancos: Duran de 7 a 14 días o hasta 3 semanas postparto.  

Recomendaciones clave: 

• Asiste a tus controles posparto, al menos, tres desde el nacimiento de tu bebé. 
• Continua con la suplementación de ácido fólico, recuerda preguntarle primero a tu médico de confianza. 
• Aliméntate saludablemente con alimentos que te aporten todos los nutrientes que necesitas como verduras, frutas, proteínas y legumbres, entre otros. 
• Proporciona a tu bebé lactancia materna exclusiva.  
• Procura estar hidratada y aumenta el consumo de líquidos durante el día. 
• Si tuviste una cesárea, asegúrate de que la herida esté limpia y seca para evitar infecciones. 
• Mantente relajada e intenta estar en calma. 
• No realices fuerzas indebidas y presta atención a síntomas anormales. ¡Ya te explicamos! 

¡Ojo con las señales de advertencia! 

• Tienes fiebre que persiste por más de un día. 
• Presencia de hemorragias intensas, con mal olor y con coágulos de sangre de un tamaño considerable. 
• Tus senos se ven enrojecidos, te duelen y están hinchados. 
• Tienes dolores inguinales, fuertes, que persisten después del quinto día del parto. 
• Te duele el pecho y tienes dificultad para respirar. 
• Tienes síntomas de depresión posparto como tristeza extrema, culpa, llanto incontrolable insomnio o sueño excesivo, pérdida o exceso del apetito, irritabilidad, ira, cefaleas, dolores corporales, cansancio extremo y ansiedad, entre otros. 

Por último, ten presente que, ante cualquier señal de alarma lo mejor será que consultes en nuestro directorio médico y te dirijas a tu IPS más cercana, consulta nuestros Directorio Médico. 

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Por último, recuerda que en Famisanar contamos con la Ruta de Promoción y Mantenimiento de Salud Integral Materno Perinatal y la Ruta de Salud Infantil para acompañarte. Si tienes dudas comunícate con nosotros:  

¡Una buena postura, beneficia tu salud!