¿Cómo puede ocurrir? Existen diferentes factores de riesgo, por ejemplo, por consumo de drogas inyectables, prácticas de inyección o de atención sanitaria poco seguras, transfusión de sangre y productos sanguíneos sin analizar, y prácticas sexuales que conllevan contacto con sangre.
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Dato curioso: ¿Sabías qué, si naciste entre 1945 y 1965, perteneces al grupo etario con mayor incidencia de infección por Hepatitis C? Este, y muchos más, son factores de riesgo para esta enfermedad que puede disminuir tu calidad de vida, averigüemos de qué se trata, tu salud no da espera.
¡No te pierdas ningún detalle Al igual que muchas otras enfermedades, en tus acciones y hábitos puedes aumentar el riesgo de infección por hepatitis C:
¿Cómo se transmite?
La hepatitis C se propaga a través del contacto con la sangre de alguien que tiene el virus por medio de situaciones como:
- Compartir agujas u otros materiales de sustancias psicoactivas.
- Sufrir un pinchazo accidental con una aguja de alguien que tiene el virus.
- Ser tatuado o perforado con herramientas o tintas que no han sido esterilizadas y fueron usadas en alguien que tiene el virus.
- Compartir artículos de aseo personas que puedan haber estado en contacto con la sangre de otra persona, por ejemplo, máquinas de afeitar o cepillos de dientes.
- Nacer de una madre con hepatitis C.
- Mantener relaciones sin protección con alguien que tiene el virus / Si tienes VIH.
- Recibiste una transfusión de sangre o un trasplante de órgano.
¡Tengamos los ojos bien abiertos, signos y síntomas!
Hasta hace poco, el tratamiento de la hepatitis C requería inyecciones semanales y medicamentos orales que muchas personas infectadas por el VHC no podían tomar debido a otros problemas de salud o a efectos secundarios inaceptables. Actualmente, el virus de la hepatitis C crónico suele curarse con medicamentos orales que se toman todos los días durante 3 meses.
Como lo indica la OMS, la infección a largo plazo con el virus de la hepatitis C se conoce como hepatitis C crónica. Esta, suele ser una infección "silenciosa" durante muchos años, hasta que el virus daña el hígado lo suficiente como para causar los signos y síntomas de la enfermedad hepática.
Dentro de los síntomas más comunes podemos encontrar la aparición de hemorragias con facilidad y propensión a hematomas, coloración amarillenta de la piel y los ojos, conocida como ictericia, orina de color oscuro, hinchazón en las piernas, fatiga, confusión, somnolencia.
A partir de lo anterior, es recomendable seguir 4 medidas de cuidado básico para prevenir la infección por Hepatitis C:
- Lavado frecuente de manos.
- Uso seguro y apropiado de las inyecciones.
- Eliminación y desecho seguro de objetos cortopunzantes.
- Uso responsable de preservativos
Si crees que estuviste expuesto al virus o presentas algunos de los síntomas mencionados anteriormente te recordamos que con nuestro Plan de Beneficios en Salud cuentas con un gran número de profesionales en salud dispuestos a acompañarte en cada etapa de tu vida.
¡Estamos de tu lado!