Seguramente has oído sobre las enfermedades de la tiroides en algún momento, hoy te contamos que estas se dividen principalmente en cinco: hipotiroidismo, hipertiroidismo, bocio, nódulos tiroideos y cáncer de tiroides.
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¿Qué tal si empezamos conocer el significado de tiroides? la tiroides es una glándula con forma de mariposa que se encuentra en tu cuello, arriba de la clavícula. Esta, se encarga de generar hormonas que controlan el metabolismo y el ritmo de las actividades de tu cuerpo; por ejemplo, determinan qué tan rápido late tu corazón o la velocidad y eficiencia con la que quemas calorías.
¡Debes estar muy atento!
Como tu salud es nuestra prioridad, estos son algunos signos y síntomas generales que te indicarán que hay alteraciones en la función que cumple la tiroides:
- Dolores articulares, musculares y en los tendones sin haber realizado esfuerzos físicos.
- Fatiga y cansancio excesivo, a pesar de haber dormido correctamente.
- Variaciones del estado de ánimo, cambios inexplicables de humor, angustia y depresión.
- Alteraciones hormonales, alteraciones menstruales e infertilidad en la mujer joven.
- Aumento o pérdida de peso, la glándula tiroides regula el peso y el metabolismo.
¿A qué nos referimos con enfermedades de la tiroides?
Las enfermedades de la tiroides son frecuentes y pueden llegar a ser confundidas con sentimientos negativos de depresión, ansiedad e inquietud. Sin embargo, no te alarmes, son enfermedades que generalmente son fáciles de tratar.
Veamos cuáles son las 5 enfermedades de la mano de nuestros especialistas de nuestro Plan de Beneficios en Salud, ¿qué tal si le damos un vistazo a cada una?:
- Hipotiroidismo: Es frecuente y se da en mayor medida en mujeres; se produce cuando la glándula tiroides produce una menor cantidad de hormonas de las necesarias para mantener tu organismo en perfecto funcionamiento. Algunos síntomas son cansancio, dificultad para concentrarte, frío y en ocasiones aumento de peso.
- Hipertiroidismo: Tiene menos frecuencia y se genera cuando la tiroides produce un exceso de hormona. Puedes sentir sudoración, fatiga, en ocasiones pérdida de peso y taquicardia.
- Bocio: Esta tiene una particularidad y es que aparece cuando el tamaño de tu glándula de tiroides aumenta. Cuando el bocio es muy grande, puedes sufrir dificultades para respirar e ingerir alimentos.
- Nódulos tiroideos: En tu glándula se puede producir uno o más bultos pequeños que se componen de líquido o sangre. Generalmente son benignos, no presentan síntomas y no son cancerígenos, sin embargo, en caso de que el tamaño o las características sean particulares, puedes realizar un diagnóstico para descartar que sean malignos.
3 consejos para mantener estable la tiroides ¡Una responsabilidad de todos los días!
Toda acción atrae un resultado, en este caso, nos cargamos de positivismo y te acompañamos para vencer cualquier problema en salud. Ante los problemas de la tiroides somos del mismo equipo, ¿qué dices si pones en práctica algunos de nuestros consejos? Actúa ahora:
- Adopta una alimentación saludable, especialmente si hablamos de mujeres en edad fértil, en la gestación, la lactancia materna y en la niñez. Evitar el alto consumo de alimentos bociógenos como el brócoli, el repollo, la coliflor, entre otros. Por otra parte, incluir equilibradamente comidas que contengan Yodo (pescados y mariscos, cereales integrales, lácteos).
- Dile no al consumo de tabaco, en el humo se encuentran sustancias que incrementan el riesgo de enfermedades tiroideas autoinmunes y, adicionalmente, reduce la respuesta a los tratamientos.
- Modifica tu estilo de vida saludablemente, transforma tus hábitos y mantente más alerta que nunca. Realiza exámenes rutinarios especialmente si tienes factores de riesgo como antecedentes familiares o sospechas ¡Mejor prevenir que lamentar!
¡El cáncer de tiroides también es un riesgo real!
Aunque es poco frecuente, no debes confiarte ya que puede ser muy dañino para tu salud y es importante realizar un diagnóstico a tiempo. Este tipo de cáncer se produce cuando se forman células malignas en los tejidos de tu glándula.
Algunos signos que puedes identificar son la aparición de un bulto en el cuello e hinchazón, dolor en la parte frontal del cuello, ronquera u otros cambios de voz y dificultad para respirar. Aunque muchas personas suelen presentar nódulos en la tiroides, según el Instituto Nacional del Cáncer, en la mayoría de los casos estos son benignos y no cancerosos. Sin embargo, es importante que prestes atención a los factores de riesgo:
- Ser mujer y tener entre 25 y 65 años.
- Haberte expuesto a radiación dirigida a tu cabeza o cuello.
- Antecedentes de agrandamiento de la tiroides.
- Síndromes genéticos heredados como cáncer de la glándula tiroidea familiar, síndrome de Cowden, poliposis adenomatosa o neoplasia endocrina múltiple.
Ten en cuenta que actuar rápido marca la diferencia en tu salud, por esto, ante cualquier síntoma o duda relacionada con el funcionamiento de tu cuerpo, recuerda consultar en nuestro directorio médico; pide tu cita médica que nosotros te acompañamos en los momentos que más nos necesites.
¡A los problemas de tiroides unidos le ganamos la batalla!
