¿Cómo prevenir el abuso sexual infantil?

El abuso sexual infantil

Se presenta en una actividad sexual, cuando un niño o niña no da su consentimiento de manera voluntaria o informada, ya que su incapacidad para otorgarlo radica en su edad y desarrollo, así como su vulnerabilidad frente a esta situación. Este tipo de abuso es una violación grave en la integridad de un niño y sus derechos, convirtiéndolo en un problema legal y no solo moral. A nivel mundial, es considerado como un delito.

En este blog encontrarás información que te permitirá conocer cómo se puede prevenir el abuso sexual infantil, cómo se manifiesta, cómo afecta a los niños, cuáles son las causas, cuáles son los factores de riesgo, signos y síntomas, cómo tratarlo, cuáles son las cifras en Colombia y sus leyes.

¿Cómo se manifiesta el abuso sexual infantil en los niños y las niñas?

A través de tocamientos no deseados, explotación sexual en línea o actos sexuales forzados. La falta de consentimiento por parte de los niños es la clave para distinguirlo de otras actividades sexuales, legales y consensuadas.

¿Cómo afecta a los niños?

El abuso sexual deja secuelas psicológicas y emocionales en los niños que son víctimas, ellos pueden experimentar trastornos de ansiedad, depresión, dificultades en su desarrollo cognitivo y/o emocional, profunda tristeza y pérdida de confianza en sí mismo, en los demás y el entorno. Por otra parte, las secuelas también pueden ser físicas en algunos casos y además pueden llegar a afectar la vida del niño cuando sea adulto, en cuanto a sus relaciones personales y calidad de vida.

Es importante recalcar que el impacto de este tipo de abuso se extiende hasta los miembros que conforman la familia de la víctima, quienes experimentan a su vez un sufrimiento emocional y el comportamiento o dinámica en familia suele alterarse. La comunidad por su parte comparte dicho sufrimiento, ya que al permitir que ese abuso persista, crea un ambiente de miedo y desconfianza en la sociedad, por lo cual es importante prevenirlo y erradicarlo para beneficiar a las víctimas, a la comunidad y la sociedad.

¿Cuáles son las causas del abuso infantil?

Las causas son multifacéticas y complejas, entre las que se encuentran trastornos de la personalidad, adiciones, impulsividad, antecedentes de abuso sexual y problemas de salud mental en los perpetradores. Por otro lado, la falta de supervisión adecuada en los niños, la falta de educación sobre la prevención son otros factores sociales que contribuyen al problema.

¿Cuáles son los factores de riesgo?

Falta de supervisión de los adultos: las situaciones o condiciones que aumentan la probabilidad de que se presente el abuso sexual infantil incluyen la falta de supervisión de adultos en entornos donde los niños son vulnerables, como los jardines, colegios y otras instituciones educativas o entornos en línea
Falta de acceso no supervisado en internet: actualmente, en la era digital que vivimos, vigilar las acciones y movimientos de los niños en internet es clave para prevenirlo. El acoso sexual de una persona adulta hacia un niño o niña por medio de internet se conoce como “grooming”

Signos y síntomas del abuso sexual infantil

Los signos varían según la personalidad y edad del niño o la niña, y pueden ser evidentes o sutiles; no obstante, la detección temprana es fundamental para protegerlo e intervenir. Algunos de ellos son:

Cambios bruscos en el comportamiento
Regresión en el desarrollo
Evitación de situaciones o personas específicas
Comportamientos sexuales inapropiados para la edad del niño
Problemas de sueño
Pesadillas

Por otra parte, es recomendable estar alerta y dispuesto a escuchar a los niños cuando tengan preguntas o malestar.

¿Cómo tratar el abuso sexual infantil?

El tratamiento se centra en el bienestar de la víctima y se realiza por profesionales especializados en abuso infantil, en primera medida, con atención médica para identificar y tratar posibles afectaciones físicas en los menores. En segundo lugar, se ejecuta una terapia psicológica, que puede ser de forma individual, familiar o grupal, para revisar las secuelas psicológicas y emocionales. Esta depende de las necesidades de la persona afectada y su familia. Así mismo, el apoyo emocional constante por parte de su familia, círculo cercano y la comunidad es clave para su proceso de recuperación, ya que es indispensable promover un ambiente de comprensión donde los niños y las niñas se sientan escuchados y garantizar su seguridad para prevenir cualquier tipo de contacto con el agresor.

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¿Cómo se puede prevenir el abuso sexual infantil?

Ahora que ya sabes todos los conceptos, desde EPS Famisanar te invitamos a informarte sobre cómo prevenirlo, a través de educación y la concienciación de la comunidad. A continuación, te brindamos algunas recomendaciones:

Promueve la educación temprana sobre el respeto y los límites personales en tu hogar
Fomenta la comunicación abierta y libre de juicios entre tú y tus hijos para que se sientan cómodos hablar sobre situaciones incómodas
Enséñales a los niños, niñas y adolescentes cómo navegar en internet de forma segura y cómo identificar y denunciar el acoso cibernético
Identifica los posibles signos y síntomas de abuso para que puedas intervenir a tiempo
Denuncia los casos de cualquier sospecha de abuso sexual infantil e informar sobre cómo y a quién denunciar; así mismo, garantiza que tu denuncia sea manejada de manera adecuada y confidencial

Cifras del abuso sexual infantil en Colombia

De acuerdo con un informe del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, se registraron:

“18.054 exámenes medicolegales por presunto delito sexual en el primer semestre de 2020, de los cuales el 85,1 % fueron a niñas, niños y adolescentes entre los 0 y 17 (15.370) y en el 2021, se practicaron 18.478 de 22.607 en total, es decir, el 81,7 %
Para el año 2021, Bogotá concentró el 18,2 % de los exámenes por presunto delito sexual, seguido por Antioquia (10,2 %), Valle del Cauca (7,3 %), Cundinamarca (7,3 %), Santander (5,0 %), Atlántico (4,5 %), Bolívar (3,6 %,) Meta (3,4 %), Tolima (5,2 %) y, por último, Córdoba (2,9 %).
Con respecto al presunto responsable, los principales agresores suelen ser miembros de la familia, conocidos, pareja o exparejas; y las víctimas en su mayoría son mujeres, niñas y adolescentes y en el 50,6% de los casos el agresor es un familiar y en el 19,1 % personas conocidas. Este tipo de cifras posicionan al hogar del niño o niña como el entorno con mayor riesgo”

Las leyes en Colombia

“Ley 679 de 2021: expidió un estatuto para prevenir y contrarrestar la explotación, la pornografía y el turismo sexual con menores, en desarrollo del artículo 44 de la Constitución Nacional.
Ley 765 de 2002: aprueba el Protocolo Facultativo de la Convención sobre los Derechos del Niño relativo a la venta de niños, la prostitución infantil y la utilización de los niños en la pornografía, adoptado en Nueva York el 25 de mayo de 2000
Ley 1098 de 2006: expidió el código de la Infancia y la Adolescencia para establecer normas sustantivas y procesales para la protección integral de los niños, las niñas y los adolescentes, así como garantizar el ejercicio de sus derechos y libertades consagrados en los instrumentos internacionales de derechos humanos, en la Constitución Política y en las leyes y su restablecimiento. Dicha garantía y protección será obligación de la familia, de la sociedad y del Estado.
Resolución 0459 de 2012: estableció el protocolo para la atención en salud a víctimas de violencia sexual”