Habitualmente, por si no lo sabías, la contextura de tus glóbulos rojos es redonda y flexible, sin embargo, con la aparición de la anemia falciforme, estos cambian y su forma es en media luna o de hoz.
¿Cuáles son las implicaciones de este cambio?
¿Te quedaste sin empleo? ¡Estamos a tu lado!
Resulta que cuando la contextura de tus glóbulos rojos cambia, las células son ahora pegajosas y rígidas, por lo que corren el peligro de atascarse en los vasos sanguíneos pequeños y, por ende, bloquear el oxígeno y flujo sanguíneo a tu cuerpo.
Las consecuencias pueden ser severas, pues la anemia falciforme puede desencadenar sucesos como accidentes cardiovasculares, daños en tus órganos, ceguera, complicaciones en el embarazo, hipertensión pulmonar y mucho más.
¿Cuándo debo alertarme?
Los signos de esta enfermedad comienzan a muy temprana edad, esto sucede durante el primer año de vida, frecuentemente alrededor de los cinco meses, por lo que debes estar muy atento y actuar rápido. A continuación, te mencionamos los síntomas más frecuentes:
- Dolor periódico en el cuál sufres crisis de dolor en cualquier parte del cuerpo, como por ejemplo el abdomen, pecho, los huesos o las articulaciones.
- Fiebre superior a los 38 grados C.
- Hinchazón de pies y manos.
- Dificultades en la visión, cambios repentinos en la vista.
- Retraso en la pubertad, crecimiento y desarrollo.
- Cansancio extremo o fatiga, debilidad o dificultad para mover el cuerpo.
¡Es hora de actuar!
Si bien esta enfermedad comienza a temprana edad, existen estrategias que pueden ayudarte a aliviar el dolor y llevar una mejor calidad de vida, por esto, nuestro mejor consejo para el día de hoy es que no dejes pasar el tiempo ni que tu salud o la de un ser querido corra peligro, acude a tu médico y sigue nuestras recomendaciones:
- Evita las temperaturas extremas que puedan desencadenar crisis de dolor.
- No consumas alcohol, ni tabaco.
- Descansa bien, es fundamental que tengas buenas horas de sueño.
- Reduce el estrés.
- Mantente hidratado, bebe agua todos los días.
Ante cualquier síntoma, recuerda que cuentas con los profesionales de salud del Plan de Beneficios, donde puedes consultar para recibir el tratamiento necesario y darle el cuidado necesario a tu cuerpo. Recuerda que, para nosotros, tu salud y bienestar es lo más importante.
¡Qué el cuidado de tu salud no se detenga, juntos contra el cáncer!