No nos podemos olvidar de algo, desde tu papel de padre o cuidador, debes cuidarlos de las quemaduras de sol en su piel.
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¿Te has puesto a pensar cuántas horas pasan tus hijos al sol? ¿Podrían llegar a ser más de 3, 4, 5 o 6 horas? Ojo con esto, la salud y bienestar de los niños puede estar en riesgo cuando su piel se expone a largos periodos de tiempo bajo el sol.
En vacaciones y durante el resto del año, proteger a los niños del sol debe ser una tarea que no podemos olvidar. ¿Salieron de viaje? Cuídense, ¿Están en una piscina o en el mar? Mantengan la protección. La gravedad y la rapidez para tener una quemadura de sol depende de algunos factores como el tipo de piel, el tiempo de exposición al sol y la intensidad.
¡Cuídalos del sol en todo momento!
Los bebés menores de 6 meses, no deben estar en contacto directo con el sol ya que su piel es muy sensible, y tampoco es recomendable aplicar ninguna crema solar. Es después del medio año de vida que un bebé puede exponerse al sol, eso sí, el menor tiempo posible, utilizando protector solar especial y evitando las horas de mayor afectación del sol.
Si bien podemos encontrar beneficios y riesgos del sol, debemos ser imparciales e informarte correctamente. El sol ayuda a disminuir la presión sanguínea, mejorar la respiración, bajar el colesterol en la sangre y mucho más, pero así mismo, la exposición en largos periodos de tiempo puede resultar incómoda, dolorosa y peligrosa, recuerda que todo en exceso es malo.
De acuerdo con Clínica Internacional, tus hijos pueden experimentar quemaduras de primer y segundo grado, envejecimiento de la piel, enrojecimiento y aparición de manchas, resequedad, cambios en la textura y mal aspecto, así como un mayor índice de probabilidad de padecer cáncer de piel. Es allí donde tú debes actuar y hacer tu mayor esfuerzo para cuidar su salud.
¿Qué recomendaciones puedo tener en caso de quemadura?
Como el cuidado de tus hijos nos importa, te decimos las mejores maneras para calmar el dolor de una quemadura: hazles tomar baños fríos frecuentemente, aplícales crema hidratante sobre las zonas más afectadas. Asegúrate de que utilicen ropa cómoda y ligera. Bríndales agua constantemente y aumenta su hidratación, finalmente, es esencial que no revienten las ampollas.
¡Evitemos las quemaduras!
En esta ocasión, queremos proteger a tus hijos de todo tipo de quemadura de sol:
- Dile no al sol del mediodía, es la luz más fuerte. Entre las 10 a.m. y 4 p.m. aumenta los cuidados.
- Aplícales protector solar con un (FPS) Factor de Protección Solar de 30 o más.
- Ponles ropa y accesorios que protejan del sol: camiseta manga larga, sombrero, gafas solares, sombrillas, entre otros.
- Limita el tiempo de exposición al sol, asegúrate de que tomen descansos.
- Busca lugares frescos, la sombra es su mejor aliado.
En caso de que tu hijo llegue a presentar síntomas o signos como dolor en la piel y enrojecimiento, aparición de ampollas y quemaduras, fiebre y escalofríos, dolor de cabeza o náuseas y debilidad, te recomendamos acudir al servicio de Urgencias, recuerda que con el Plan de Beneficios de Famisanar cuentas con una amplia red de prestadores que puedes consultar en nuestro directorio médico.
¡Protegemos a los niños de quemaduras de sol!
¿Cómo reconocer la alergia al sol?
