Yo era un amigo cercano de ella, era, porque nos alejamos después de que su esposo nos prohibiera seguir comunicándonos y mantener la amistad.

Lo último que supe de ella, es que era una mujer muy reprimida, le daba miedo salir sin el permiso de su esposo, temía volver a casa y encontrarlo de mal genio y tener que entrar en una discusión.

En el mundo, existen miles de casos como el de María, en los que mujeres de todas las edades sufren maltrato por parte de sus familiares o personas desconocidas. Según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en un informe realizado en el 2018, 1 de cada 3 mujeres en el mundo ha sido víctima de maltrato físico o sexual por parte de su pareja.

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¿Cuáles son los tipos de violencia?

Maltrato físico: Se produce cuando la pareja agrede a la mujer físicamente con sus puños o a través de empujones, patadas o bofetadas causando moretones, heridas y dolor.
Maltrato sexual: La mujer es forzada a tener relaciones sexuales contra su propia voluntad, y puede presentar humillaciones que atentan contra su dignidad.
Maltrato psicológico: Se da a través de la manipulación emocional, en donde son comunes las amenazas, intimidaciones, aislamientos, entre muchas otras.
Maltrato económico: El maltratador hace uso del dinero de la mujer sin su consentimiento, toma las decisiones de la economía familiar y restringe y prohíbe el control de sus recursos.
Maltrato laboral: La mujer es víctima de unas injustas condiciones en su ámbito de trabajo, como un sueldo insuficiente, diferente trato o falta de oportunidades por su sexo.

¡Tú puedes ayudar a detener los casos de violencia!

Así no sea tu caso, imagina por un momento que una amiga, o mucho peor, alguna mujer de tu familia sea víctima de violencia o abuso, aquí te contamos que puedes hacer:

Hazle saber que ella no es la culpable, es usual que la mujer tenga sentimientos de culpabilidad por lo que está viviendo, sin embargo, la violencia no es justificación de ningún contexto, el problema es el agresor.
No dejes pasar el tiempo, si notas que la situación se mantiene igual, recuerda que el tiempo juega en su contra y que cada día la violencia puede presentarse de una manera más agresiva, proponle hablar con las autoridades o buscar ayuda profesional. Recuerda que con el Plan de Beneficios de Salud de Famisanar tú y todos nuestros afiliados cuentan con apoyo en cada etapa de la vida.
Brinda un acompañamiento y apoyo a la mujer que sea víctima, respeta su privacidad y dale su espacio, pero hazle saber que tú estás ahí para lo que quiera contarte. Generalmente, estas mujeres se sienten solas y desprotegidas.
Procura estar atento a cualquier señal de violencia, mantén tu celular prendido y con sonido en caso de que la víctima necesite ayuda y cuente únicamente contigo.
No la presiones ni juzgues, sé paciente, es importante que aprendas a identificar si aún no está preparada o convencida para dejar a su pareja.

Si eres víctima de algún tipo de violencia contra la mujer o eres testigo de algún suceso ¡Repórtalo! Recuerda que cuentas con la Línea Purpura, una línea telefónica en donde mujeres, psicólogas, enfermeras y trabajadoras sociales, escuchan a otras mujeres víctimas de violencia, comunícate al 01 8000 112 137 en Bogotá, o al WhatsApp 300 755 18 46. A nivel nacional puedes comunicarte con la Línea de Orientación a las Mujeres #155 recuerda que solo aplica para mayores de 18 años.